Carlos Tevez es el nuevo entrenador de Rosario Central, y más allá de las implicancias que generó la noticia en el mundo del fútbol por la envergadura del ex futbolista, provocó un ludo de consecuencias que unen - una vez más - al fútbol con la política y colocan en el centro de la escena a Mauricio Macri y su deseo de revancha contra Juan Román Riquelme en Boca Juniors.
En primer lugar, el viaje del "Apache" a Santa Fe, además de situarlo nuevamente en la actividad deportiva profesional, lo sacó al menos momentáneamente de la órbita política en la que el ex presidente de la Nación proyectaba al ex futbolista como futuro adversario electoral del vicepresidente xeneize.
Pero además, como efecto secundario, metía en esa disputa a Horacio Rodríguez Larreta, ya que Tevez anunció su nueva función como DT colocando como su compañero de cuerpo técnico a Carlos "Chapa" Retegui, el ex entrenador de Hockey con las Leonas que actualmente es secretario de Deportes porteño.
Según pudo saber Política Argentina, Claudio "Chiqui" Tapia mantiene un buen vínculo con Tevez en términos personales y, desde ese afecto, fue quien instó al vicepresidente de Rosario Central, Ricardo Carloni, a convocar al ex futbolista para la dirección técnica del club. "¿Por qué no lo llamás a Carlos?", habría sido la pregunta disparadora.
La iniciativa del presidente de la AFA habría tenido que ver con que tras la muerte de Segundo Tevez el dirigente "estuvo cerca" del ex delantero en solidaridad con el mal momento personal que ese hecho le generó. En ese contexto es que habría aparecido la consideración de que la dirección técnica en la Primera del fútbol argentino se mostraba como una buena alternativa.
No obstante, de manera lateral a eso corre lo que podría ser analizado por terceros como un "favor" involuntario a Tevez para que se desmarcara del macrismo, que explícitamente buscaba echar mano al "Apache" para sumirlo en un conflicto electoral contra Riquelme, el máximo ídolo xeneize, del que podría haberlo salido sin una ecuación favorable.
A la vez, otra interpretación también podría arrojar que el hecho constituyó una quita indeseada de un "alfil" importante como Tevez para Angelici, y para Macri, en su intención electoral para retornar a Boca Juniors.Esto último es lo que molestó a los dos últimos, principalmente el ex mandatario nacional, del "Apache".
Es que este medio también pudo saber desde el interior del sector macrista que sigue haciendo política en Boca que tanto la decisión de Tevez de ser DT en Rosario como la idea inicial de hacerlo llevándose a su cuerpo técnico al "Chapa" Retegui y así quitarlo de su rol como funcionario de Larreta hicieron que fuera Macri quien quedó "más caliente" con el "Apache".
Incluso más enojado que el Daniel "Tano" Angelici, pese al hecho de que éste fue el último presidente xeneize macrista y el principal derrotado contra Riquelme en 2019 a través de su delfín Christian Gribaudo.
El caso es que fuera de cualquier hipótesis, Macri dijo en diversas entrevistas que pensaba a Tévez, además de como un "amigo", como en un futuro dedicándose a la política deportiva en Boca, "aprendiendo" de otros con más experiencia. Encima, según mencionan, el ex delantero de Boca y la Juventus, entre otros, no le avisó acerca del paso que iba a dar.
Parece alejada, hoy, esa expectativa de Tevez político, lo cual deja al líder PRO vacío de alternativas competitivas contra Riquelme (que a su peso específico como máximo ídolo xeneize comenzó a agregarle resultados), a quien incluso Macri comparó con Cristina Fernández de Kirchner y trazó una analogía entre el presidente Alberto Fernández y la máxima autoridad institucional xeneize, Jorge Amor Ameal.