El presidente Emmanuel Macron advirtió que se avecinan meses difíciles en los que pidió a la población hacer “sacrificios”. El mandatario aseguró que el país se encuentra en un "punto de inflexión" de cara a un invierno difícil como consecuencia de la guerra en Ucrania y los efectos del cambio climático, por lo que prevé escasez de recursos y aumentos en los costos de la energía eléctrica.
Francia alerta sobre un grave panorama de efectos globales. Este 24 de agosto, en el primer Consejo de Ministros tras el periodo de receso de verano, el presidente Emmanuel Macron aseguró que el mundo se enfrenta al fin de una abundancia de bienes y recursos y "de cierta despreocupación".
"Creo que asistimos a una gran convulsión, un cambio radical. En el fondo, lo que estamos viviendo es el fin de la abundancia, de la liquidez sin costo", sostuvo Macron en unas sombrías declaraciones que contrastaron con su habitual tono optimista.
El mandatario apuntó a una serie de crisis. Entre ellas se destacan los efectos del cambio climático, que están generando notorias sequías en varios países, tras temperaturas extremas e incendios. Para Macron, la escasez de algunas materias primas y del agua está sobre la mesa y habrá que tomar medidas urgentes al respecto.
Además, el mandatario francés señaló la interrupción del comercio internacional que causó daños durante el período de pandemia y la guerra en Ucrania. Un conflicto que sigue disparando el precio del gas y de la energía eléctrica en medio de las sanciones a Rusia, país que llegó a catapultarse como el principal exportador de hidrocarburos para varias naciones del Viejo Continente. El dirigente francés consideró que “la libertad tiene un costo” y el conflicto en curso en suelo europeo ha traído "el fin de la despreocupación" en todo el continente. France24 / Efe / Reuters