En España, la Policía ha desarticulado una banda criminal que reclutaba a menores suecos y daneses para cometer asesinatos y atentados con explosivos. Tres personas han sido detenidas en Alicante.
Se trata de un matrimonio y de su hijo menor que jugaba un papel fundamental en la contratación mediante un canal de Telegram. La operación se inició en Benalmádena (Málaga) con la detención de un joven sueco, que viajó a España para asesinar a un motero de una banda rival.
La red criminal que encargaba asesinatos, se dedicaba al tráfico de armas y drogas y al blanqueo de dinero. Para cometer este hecho, los miembros de la red tenían previsto el envío de un fusil de asalto y planificado un plan de huida, que en un primer momento sería utilizando un patinete eléctrico.
De forma paralela y coordinada, se detuvo en Dinamarca a otros dos menores de edad, también de nacionalidad sueca, que se habían desplazado hasta aquel país con la intención de cometer otro asesinato, a los que se les intervinieron otras dos armas de fuego.
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