La interventora de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), Cristina Caamaño, presentó ante la Justicia Federal de Mar del Plata una denuncia por presunto espionaje ilegal realizado durante el Gobierno de Mauricio Macri sobre familiares de los tripulantes del ARA San Juan, en momentos en el que el submarino aún permanecía desaparecido, entre enero y junio del 2018.
En la presentación judicial, realizada ante la Fiscalía Federal Nº 2 marplatense, a cargo de Daniel Adler, se solicitó la citación a indagatoria del exdirector general del organismo, Gustavo Arribas; de la exsubdirectora, Silvia Majdalani; y del expresidente Macri, entre otros. Asimismo, se pidió que se llame a indagatoria al exjefe de la Delegación Mar del Plata de la AFI -en el tiempo en que ocurrieron los hechos denunciados-, así como al exdirector de Reunión Interior, todos ellos "en calidad de responsables de fijar los lineamientos estratégicos y objetivos generales de la política de Inteligencia Nacional".
El ministro de Defensa, Agustín Rossi, calificó de "ilegal e inhumano" el presunto espionaje denunciado y, a las 17, brindará una conferencia de prensa junto a Caamaño en la Casa Rosada, para brindar detalles de la presentación realizada. Los familiares de los tripulantes, quienes fueron informados de manera privada por la cartera de Defensa sobre el hallazgo de documentación "que refleja tareas de seguimiento y vigilancia" y que motivó la denuncia, adelantaron a Télam que intervendrán como querellantes en el expediente.
En el texto de la denuncia, Caamaño subrayó que las "tareas" ventiladas "no se encuentran ordenadas ni autorizadas por ningún magistrado", sino que "sólo fueron dispuestas por las autoridades del organismo que hoy se encuentra intervenido". En el mismo sentido, subrayó que, a la luz de las pruebas encontradas, se puede hablar "lisa y llanamente de producción de inteligencia ilegal", realizada meses después de la desaparición del submarino, ocurrida en noviembre del 2017.
El escrito agrega que "el material acompañado demuestra que la AFI hizo inteligencia sobre familiares, amigos y allegados de los tripulantes del ARA San Juan y ello por el solo hecho de pertenecer al colectivo de familiares de las víctimas del hundimiento". El material fue encontrado en soportes digitales en la Delegación Mar del Plata de la AFI y fue analizado con motivo de un requerimiento judicial realizado por el Juzgado Federal de Primera Instancia de Dolores, en el marco de otra causa. Según la presentación, los documentos que acreditan el espionaje "fueron hallados puntualmente en tres discos rígidos diferentes", que incluían 29 archivos digitales: constan seguimientos efectuados en manifestaciones en Mar del Plata, cuando las tareas de búsqueda y rescate todavía no habían dado con los restos de la nave.
El abogado Luis Tagliapietra, padre del teniente de corbeta Alejandro Tagliapietra, una de las víctimas del naufragio, calificó como "perversa" la posibilidad de que los familiares hayan sido espiados. "Esto es perverso, y confirma lo que yo ya había denunciado en 2018", dijo Tagliapietra, en declaraciones a Radio 10, y recordó que en marzo de ese año denunció "una seguidilla de intervenciones" en su correo electrónico "y en el teléfono", pero que "lamentablemente no hicieron nada". Además, agregó: "Lo que más me horroriza es que dicen que además nos seguían, nos fotografiaban, y esto nosotros lo percibimos cuando acampamos en Plaza de Mayo".
En la misma línea, María Victoria Morales, madre del cabo principal Luis García, aseguró que los familiares de las víctimas se sienten "manoseados y basureados" ante estas revelaciones."No les importó nuestro dolor. No les interesó nada en lo afectivo. Jugaron con nuestro sufrimiento y nuestros sentimientos", expresó a Télam y señaló que muchos tenían "fuertes sospechas" de que eran espiados.