La expresidenta Cristina Kirchner visitó la Universidad Nacional del Oeste, creada en Merlo, para ser distinguida con un doctorado Honoris Causa. Durante el evento, ofreció una charla magistral sobre la economía bimonetaria y aprovechó la ocasión para criticar al presidente por sus políticas, que, en solo nueve meses, han dejado en la ruina a millones de argentinos.
En su intervención, hizo un llamado a la unidad del peronismo y a calmar las tensiones internas, en especial entre el gobernador Axel Kicillof y Máximo Kirchner, líder de La Cámpora. Al finalizar la conferencia, salió a saludar a los jóvenes que no pudieron ingresar y subió al escenario a Kicillof y a ‘Wado’ de Pedro. En ese momento, les pidió que era fundamental hablar sin pelearse: “Estemos junto a los que más lo necesitan. La gente está pasando por muchos problemas y, muchas veces, no tiene la posibilidad de ver las cosas con claridad. Hay que hablar sin pelearnos con nadie”, señaló Cristina, en clara referencia a las tensiones internas en el peronismo.
Durante su discurso, Cristina identificó la deuda en dólares como el principal problema económico de la Argentina, en el marco de una economía marcada por la escasez de divisas. “El déficit fiscal no es lo mejor que le puede pasar a un país, pero debe haber alguna razón para que, después de 2008, muy pocos países del mundo tengan superávit fiscal”, señaló. En ese contexto, la expresidenta explicó que esto “no significa que los demás países sean degenerados fiscales”, sino que “el problema es cuando no se tiene financiamiento para ese déficit”. También analizó que, en Argentina, “la unidad de valor es el dólar; el atesoramiento es en dólares, y el peso es solo para las transacciones”.
Recordó que entre 2003 y 2008, los gobiernos de Néstor Kirchner y el suyo completaron un ciclo de superávit fiscal con crecimiento e inclusión social. “Que todos se mueran de hambre y te sobre el dinero es fantástico, pero la verdadera habilidad está en que la gente coma y tú puedas administrar el Estado. Gobernar un país no es solo macroeconomía”, señaló.
En otro momento de su discurso, la exvicepresidenta se refirió al cepo cambiario: “Macri levantó el cepo y reventó el país, trajo de vuelta al FMI y tuvo que reinstaurarlo, pero con un tope de 200 mugrosos dólares, que es lo que sigue hasta hoy. Pasaron macristas, peronistas y libertarios, y el cepo sigue”.
Luego, hizo una crítica más directa: “Nació la criatura, y el padre se dio cuenta de que las ideas que traía de los austríacos y otros chocaron con la realidad argentina”. Agregó que, a pesar de esto, “su ministro de Economía sigue diciendo públicamente que no pueden devaluar porque, de hacerlo, los precios se dispararían. ¿Cómo? ¿No era que la inflación era, como decía Milton Friedman, un fenómeno exclusivamente monetario? Presidente, deje a Friedman y a la escuela austríaca, tome el manual argentino y, por favor, siéntese a administrar el país”, exigió la expresidenta.
“¡Basta, Milei, de engañar y envenenar a nuestros jóvenes diciendo que hace 100 años no éramos un desastre!”, reclamó. “Si estábamos tan bien, ¿por qué crees que surgió el peronismo, hermano? A ver si los gorilas en este país se avivan alguna vez”, remató.
“Siento que, si la educación argentina hubiera llegado a todos los rincones con historia e información, estas cosas no estarían ocurriendo. No podría venir un lunático a decirnos cosas que nunca sucedieron, que son mentira y no existen”, arremetió. En relación a lo que sucedió esta semana dentro y fuera del Congreso, Cristina defendió a los jubilados. “Esos cinco radicales que se dieron vuelta porque claramente les compraron el voto pegaron a Milei con la casta también”, aseguró. “La casta de la que él hablaba es la misma con la que logró perjudicar a los jubilados”, sentenció.
