Durante años Greenpeace se mantuvo alerta a las posibilidades tecnológicas que podían ser de utilidad a la hora de realizar investigaciones científicas y documentar los lugares más inalcanzables. Con este objetivo en mente hace varios años se alquilaron mini submarinos con las capacidades necesarias para hacer frente a los desafíos más inesperados en las profundidades de los océanos del mundo, desde el Mar de Bering hasta la Antártida.
Este año como parte de la travesía para proteger el Mar Argentino recibimos al barco Arctic Sunrise que llegó desde la Antártida con dos minisubmarinos a bordo para poder cumplir con tareas clave:
– documentar una zona del Agujero Azul (de gran importancia ecosistémica del Mar Argentino) para conocer el impacto de la pesca intensiva y no regulada en la configuración del fondo marino y la biodiversidad bentónica.
-cumplir con el plan de trabajo científico de las personas a bordo que son expertas en oceanografía y biodiversidad marina.
¿Cuál es nuestro objetivo? Nuestro objetivo es poder encontrar y mostrar algunos de los EMV (Ecosistemas marinos vulnerables) restantes intactos como muestras representativas de cómo se puede recuperar el fondo marino si se prohíben las técnicas de pesca destructivas en Agujero Azul. Con esta tarea ayudamos a las iniciativas de conservación proporcionando información real de primera mano sobre estos ecosistemas únicos bentónicos. Mantener el fondo marino protegido es el primer paso para proteger la vida que vive y transita en las aguas, incluidas las actividades humanas que sustentan.
¿Cómo son los mini submarinos? Los mini submarinos se llaman “Dual DeepWorker 2000” y cuentan con la última tecnología para permitir operaciones ágiles en contextos muy variados. A diferencia de submarinos de mayor tamaño poseen las siguientes ventajas:
-son flexibles: pueden ser transportados a bordo de un barco y mantener independencia de ese barco mientras bucean. Tienen una relación peso/potencia favorable y seis propulsores, lo que les otorga una excelente maniobrabilidad
-son livianos: pesan 3 toneladas y pueden ser levantados con una grúa (que está en el barco) tanto para sumergirlos como para quitarlos del agua.
-son rápidos: pueden llegar a una profundidad máxima de 600 metros en poco tiempo -son sencillos para operar: se manejan con pedales. Con el pie izquierdo se lo hace subir o bajar y con el derecho se lo lleva adelante o atrás y a la izquierda o a la derecha.
-tienen buena capacidad a pesar de su tamaño: pueden ocuparlo 2 personas. Cada persona tiene una cúpula de visualización de acrílico de 24 pulgadas de diámetro, que ofrece un campo de visión amplio y se usa para entrar y salir del submarino. La persona que pilotea puede pasar el control a su acompañante.
-son resistentes: pueden permanecer sumergidos 8 horas.
La comunicación entre el barco y los minisubmarinos es a través de radios. La persona que supervisa la actividad de buceo (en el barco) está en constante contacto con quienes pilotean el minisubmarino para monitorear una variedad de funciones (energía de la batería, niveles de oxígeno etc.) en intervalos de 15 minutos. A pesar de todas estas ventajas no cualquiera puede pilotear un minisubmarino. Cada persona que lo haga debe recibir un estricto entrenamiento.
Sobre la seguridad. En el caso de que hubiera que aplicar un plan de acción de emergencia hay varias opciones para llevar el minisubmarino de regreso a la superficie. Si los motores dejaran de funcionar, porque se acabó la batería o porque entró algo en los propulsores, o si hay un problema eléctrico, debajo del minisubmarino hay tanques y se puede usar ese aire para flotar y volver a superficie. En el improbable caso de que fuera necesario, se puede también dejar caer un peso de seguridad, que también permite flotar. Y si todo eso falla, por ejemplo, si el minisubmarino quedara atrapado en grandes redes de pesca (que es poco probable) se puede dejar caer parte del chasis secundario. También se cuenta con sistemas de soporte que brindan tiempo para que incluso otro minisubmarino se despliegue para una misión de rescate.
La importancia de investigar y documentar el Agujero Azul. El Agujero Azul es una zona de aguas internacionales que se ubica aproximadamente a 500 km al este del Golfo de San Jorge en la Patagonia argentina. Tiene un rol ecológico central dentro de los océanos globales y es un lugar de alimentación para especies clave, como la Ballena Franca Austral y otras cuyo estado de conservación es vulnerable, tal como el cachalote, el rorcual y los albatros. Lugares únicos como el Agujero Azul deben convertirse en un santuario oceánico para estar protegido, eliminar los impactos de las industrias destructivas y brindar alivio y resiliencia para que la vida marina y los ecosistemas puedan recuperarse luego de años de destrucción. Fuente: Greenpeace