Logró convertirlas en ley con los votos de Cambiemos y del bloque peronista que responde a los gobernadores.
Tras una sesión en la que imperaron los cuestionamientos a la política económica y las críticas por el trámite exprés de los proyectos, el Senado sancionó el paquete legislativo impulsado por la administración de Mauricio Macri tras el acuerdo que firmó con 22 provincias y la ciudad de Buenos Aires.
Al término de ocho horas de un inédito debate en simultáneo de tres proyectos, Cambiemos logró las mayorías necesarias para sancionar las leyes en tres votaciones diferentes gracias al aporte clave del sector peronista que responde a los gobernadores y que conduce Miguel Pichetto (Justicialista-Río Negro).
Así, el presupuesto nacional 2018 fue sancionado por 54 votos a favor y 14 en contra, la reforma tributaria por 52 a 15 y la prórroga del impuesto al cheque por 65 votos a favor, 2 en contra y una abstención.
En su primera participación en su regreso al Senado Cristina Kirchner (FPV-Buenos Aires) debió soportar sin inmutarse, aunque no pudo evitar hacer sus típicos gestos, las críticas del oficialismo a las administraciones kirchneristas. "Nos hicimos cargo de un gobierno que heredó los males crónicos del país: presión tributaria altísima, inflación, déficit comercial", le enrostró disparó Luis Naidenoff (UCR-Formosa), jefe del interbloque Cambiemos. Fue una réplica a la intervención de la ex presidenta, quien unos minutos antes había asegurado que el paquete fiscal que impulsa el Gobierno favorece a las empresas. "Con la reducción de los aportes patronales estamos desfinanciando la Anses. ¿A favor de quién? De los empresarios", afirmó Cristina Kirchner.