En plena pandemia de Covid-19, las protestas se multiplicaron en Chile al cumplirse el 47º aniversario del golpe de Estado del 11 de septiembre de 1973 contra el socialista Salvador Allende. Esta fecha recuerda el alzamiento militar encabezado por el general Augusto Pinochet, que desembocó en bombardeos al Palacio de La Moneda y el suicidio de Allende.
En la céntrica Plaza Italia, corazón de las protestas sociales de 2019, más de mil manifestantes se reunieron a recordar al exmandatario, cuya figura se ha visto resignificada desde el inicio de las movilizaciones en el país austral. Bajo el lema "Iluminemos Chile con verdad y justicia", los ciudadanos protagonizaron la mayor movilización desde la llegada del coronavirus al país en marzo. Esto marca un retorno del movimiento en las calles, que ha logrado reunir a grupos de personas durante las últimas dos semanas.
A poco más de un mes de la realización del plebiscito para reformar la Constitución -de corte neoliberal, heredada de la dictadura de Pinochet-, entre los manifestantes prevalecieron las consignas contra el Gobierno de Sebastián Piñera y los reclamos para una profunda renovación de la Carta Magna. También se registraron algunos disturbios en las zonas cercanas a la plaza, donde se realizaron barricadas y cortes de calles. Carabineros, la policía militarizada chilena, dispersó a los manifestantes con carros lanza-aguas y detuvo a 14 personas.