"Lo que más daño nos hizo fue la apertura del mercado con los beneficios impositivos y financieros a la yerba importada", denunció el productor Cristian Klingbell. Pequeños productores yerbateros atraviesan una profunda crisis que pone en riesgo la continuidad de su trabajo ante la apertura de las importaciones que impuso el gobierno de Javier Milei que generó una competencia desleal con Paraguay y Brasil.
En diálogo con De Una el productor Cristian Klingbell contó que la situación del sector se vio fuertemente perjudicada por un artículo del Decreto de Necesidad y Urgencia 70/2023 de la gestión libertaria que desreguló la actividad que sacándole facultades al Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM).
Esa situación, contó el productor, hizo que muchas empresas de yerba mate prefieran comprar la materia prima a Paraguay y Brasil y comercializarlas en paquetes que dicen "industria nacional".
"Lo que más daño nos hizo fue la apertura del mercado con los beneficios impositivos y financieros a la yerba importada. A nosotros nos están ofreciendo, para comprarnos nuestra materia prima, cheques a 120 días y la yerba importada lo pagan en 30 días. ¿Cómo que hay plata para pagar lo importado prácticamente de contado y nosotros tenemos que estar aguantando 4 meses para cobrar nuestra producción?", preguntó el productor.
"Brasil y Paraguay son muy competitivos en los costos finales. Son muchos más baratos produciendo. Nosotros éramos más baratos hace 5 meses, ahora somos extremadamente caros. Nos deja una lucha desleal comparado con nuestro vecinos productores", agregó.
Klingbell indicó que las políticas del Gobierno generaron «un problema grave en el sector productivo» y comentó que están analizando medidas de protesta si no recibe respuestas por parte del Gobierno. «Los productores están sumándose para salir a hacer una manifestación para demostrar su disconformidad con la situación que estamos teniendo que está empeorando día a día», puntualizó.
