El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, afirmó este martes que la inflación es su "máxima prioridad doméstica" en un discurso donde explicó su plan para reducir los precios, que no incluyó medidas nuevas, mientras se ve acosado por la críticas.
Biden habló desde la Casa Blanca sobre inflación en una intervención en clave electoral ante la proximidad de los comicios legislativos de noviembre próximo, donde es posible que los demócratas pierdan el control de ambas cámaras del Congreso.
Biden apuntó que las dos causas principales de la carestía son la pandemia, que ha afectado a la cadena de suministros, y la invasión rusa de Ucrania que ha provocado un incremento de precios de la gasolina y de los alimentos. El presidente hizo hincapié en que esos dos factores tienen una "naturaleza global", con lo que han afectado a varios países. AFP y EFE