Cientos de miles de franceses salieron a las calles de las principales ciudades del país para conmemorar la fecha, que converge con la inconformidad social por la reciente aprobación de la reforma de las pensiones del presidente Emmanuel Macron. En las manifestaciones de este lunes participaron líderes sindicales extranjeros y se unieron las ocho centrales obreras francesas por primera vez en 14 años.
Avanzan las manifestaciones por el Día Internacional de los Trabajadores en Francia. Una jornada de protestas multitudinarias que combina la conmemoración de la fecha con el malestar social por la reforma de las pensiones, que sube la edad de jubilación de 62 a 64 años. Una propuesta aprobada por decreto por el presidente Emmanuel Macron y ratificada por la Sala Constitucional en un fallo brindado el 14 de abril.
París, Nantes y Lyon son las ciudades que concentran la atención de las fuerzas policiales por la gran cantidad de manifestantes en las calles. En estas tres ciudades se registraron los primeros incidentes y la policía respondió con gases lacrimógenos contra algunos grupos de personas.
Aunque las movilizaciones han sido masivas, el número de participantes es cuestión de debate entre los sindicatos y la policía. Según datos preliminares de la Confederación General del Trabajo (CGT), una de las principales uniones sindicales de Francia, 550.000 personas han salido a las calles de París y alrededor de 2,3 millones en todo el país. Pero el Ministerio del Interior matizó estas cifras y reportó que 782.000 ciudadanos marcharon en todo el territorio, entre ellas 112.000 en París, donde se han registrado más de 60 manifestantes han sido detenidos. En Nantes, los sindicatos que convocaron las movilizaciones afirman que han participado 80.000 personas, mientras que la policía contabiliza poco más de 17.000. Y al menos 14 manifestantes han sido arrestados en medio de disturbios en esa ciudad. Mientras que en Lyon algunas tiendas fueron vandalizadas y varios automóviles fueron incendiados. (...) F24 / AFP / Reuters