El Estado español aprobó la adquisición del 10% del paquete accionario de Telefónica, medida con la cual vuelve a convertirse en un "accionista público de referencia", en un reconocimiento de la importancia estratégica de la compañía.
El Gobierno español, presidido por Pedro Sánchez, difundió este martes en un comunicado la aprobación de la compra de hasta un 10% del capital de la empresa que brinda a la población servicios de internet y telefonía fija y móvil, y participa de la industria audiovisual.
El Poder Ejecutivo español justificó esta decisión en el hecho de que Telefónica es "una de las principales compañías del país, líder en el sector de las telecomunicaciones y clave en otros ámbitos estratégicos", según publicó la agencia France Press.
"La presencia de un accionista público de referencia en el capital de esta compañía supondrá un refuerzo para su estabilidad accionarial", señaló el Ministerio de Hacienda y Función Pública.
Medios internacionales interpretaron que esta decisión permitirá contrarrestar la maniobra de la operadora de telecomunicaciones Saudí Telecom (STC), que adquirió recientemente el 9,9% de las acciones de Telefónica por 2.100 millones de euros, con lo que se convirtió en el principal accionista de la telco, muy por encima de BBVA (4,87%), BlackRock (4,48%) y la Caixa (3,5%).
También indicaron que el 10% que prevé adquirir el estado español, "equivaldría a 2.500 millones de euros, dado que su capitalización asciende en la actualidad a 20.500 millones". Telefónica, según el sindicato UGT, pretende recortar alrededor de 5.000 puestos de trabajo en España hasta 2025, para mejorar su productividad y organización.
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